Repito un breve gesto anual: compartir algunas lecturas que han dado sentido a mi mundo lector en el 2005.
Siento agradecimiento, y mucho, por haberme encontrado con estas lecturas.
Los romanos ya conocían los filósofos griegos…. El éxito de los embajadores del año 155 a.C. demostró que los romanos estaban ávidos de filosofía. No les bastaba con haber conquistado la mitad del mundo, sino que además querían saber qué hacer con su conquista y cómo gobernar razonablemente sus vidas. La antigua moral, el respeto a la jerarquía tradicional ya no bastaban. Crecía la inquietud y también el descontento
Qué pensador más valiente. Leerlo, da coraje a la lucidez.
Finalmente, nada es sagrado, excepto la integridad de tus ideas.
La mirada inteligente de un médico ayuda a vivir. ¡Gracias por la recomendación, Àlex Rovira!
Es muy actual y muy necesario, aunque sus tesis tengan un cierto tono de budismo dominical.
Una delicada escritura. Desnudez y fragilidad. Dos buenas novelas.
Un gran libro en la estela de Víctor Frankl y su SIEMPRE esencial El hombre en busca de sentido.
¡Qué análisis más inteligente del poder económico!
Lectura refrescante y original. Un placer.
Una obra maestra. Algunos escritores lo sabían todo del alma humana.
Prefiero servirlos a mi modo que gobernarlos al suyo.
Una sobria, elegante, emotiva y descarnada historia que muestra qué fue la Guerra Civil española.
A ratos, un brillantísimo ensayo sobre nuestras emociones en el mundo de hoy.
Un regalo inmenso. La mejor novela que he leído este año sobre la India hacia 1975. Pocas veces he disfrutado tanto. ¡Gracias a Alex Pla de la librería Paideia por su consejo!
Creo recordar una noticia en el periódico donde se relataban textos que fueron leídos en el entierro de esta genial escritora. Probablemente, el libro más hermoso para regalar de todos los que he disfrutado este año. Pura sabiduría.
Jordi Nadal 2.1.06
Publicado originalmente en www.infonomia.com