Un gesto anual: compartir algunas lecturas que han dado sentido a mi vida como lector durante el año 2007 (y vaya una explicación no solicitada: en algunos casos, hablaré de libros de Plataforma Editorial (siendo juez y parte, pero son algunos de los libros que adoro).
¡Qué bueno cuando ciencia y humanismo se unen y nos enseñan a vivir!
http://www.plataformaeditorial.com/libro/702-pequenas-grandes-cosas
El libro perfecto para la educación de la ciudadanía. Leerlo es una lección de vida.
Pocos libros más humanos, más lúcidos y más llenos de amor.
http://www.plataformaeditorial.com/libro/707-el-viaje-que-cambio-mi-destino
Una novela tierna, lúcida y espléndida. Si lo lees y no lloras, hace dos años que estás muerto y no te has enterado.
El lenguaje desnudo de un duelo amoroso. Bella confesión de una intimidad
¡Cuánta lucidez analizando el sistema actual! (...) la generación de nueva riqueza se ha producido en profunda conexión con la desarticulación de las rígidas burocracias gubernamentales y empresariales. (...) Este crecimiento tiene un precio elevado: mayor desigualdad económica y mayor inestabilidad social. (...)
La novela de un narrador que sabe mirar y describir. (...) Cuando uno emigra, huye de la lentitud. Cuando se exilia, huye de la velocidad.
¡Que prosa más intensa! La inquietante lectura de un potentísimo autor.
Qué valientes son los libros que reconocen que en el riesgo está la salvación. El miedo es el medio, es una idea genial.
Impresionante novela sobre una escena de la Rusia revolucionaria.
La pura intensidad de la inteligencia. La fiesta de quien sabe. El conocimiento luminoso. El verso de Coleridge es inmenso. Trabajo sin esperanza es tirar el néctar por un colador Y esperanza sin objeto no tiene futuro.
Un año sin leer a Kapuscinski sería (si hay novedad) un año perdido. ...El encuentro con el Otro, con personas diferentes, desde siempre ha constituido la experiencia básica y universal de nuestra especie. ...Todo reportaje tiene muchos autores, y únicamente una añeja costumbre hace que lo firmemos con un solo nombre. ... ¿Y de qué somos responsables? Del camino. ...
Si no han descubierto a Comte Sponville, qué suerte tienen, porque cada libro es una fiesta de lucidez. El bien (en el sentido moral del término) y los bienes (en el sentido económico) no siempre forman una buena pareja. ...
Profundo, humano, rico en matices, lleno de pensamientos útiles, cultísimo.
Jordi Nadal 1 de enero 2008